La única forma para que el pueblo de Israel se mantuviera unido a Jehová era a través de ofrendas es decir ofreciendo a Dios algo que lo mantuviera en esa unidad estrecha.
Cuando el pueblo se olvidaba de hacer ofrendas a Dios se alejaba y se olvidaba de el.
Ofrendar es ofrecer, en la antigüedad se tenía que ofrecer animales que estén perfectos en su parte física.
En este tiempo Dios nos exige dos tipos de ofrendas o sacrificios:
1. Debemos entregarnos a nosotros Mismos. Romanos 12: 1 “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.” todo lo que hay en la tierra le pertenece a Dios por lo tanto no hay nada nuestro que le podamos ofrecer.
Nuestro cuerpo no es que nos pertenezca para podérselo ofrecer, Dios permite que se lo ofrezcamos de manera voluntaria porque él nos ha dado la libertad ofrecerlo a él o al mundo.
El Rey David consideraba que el ofrendaba porque era Jehová quien le daba para que lo haga. 1 Crónicas 29: 14 “Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos.”
El ofrecer algo no necesariamente tiene que ver con cosas materiales o económicas, más que dinero muchas personas nos quieren es a nosotros y nuestra forma de ser. Un abrazo, una caricia, una palabra de amor pueden ser más que suficientes para alegrar el corazón de alguien.
Como Dar nuestras Ofrendas.
1. Debemos entender que las ofrendas que ofrecemos no nos pertenecen le pertenecen a Dios. V 1-2 a “Habló Jehová a Moisés, diciendo: Manda a los hijos de Israel, y diles: Mi ofrenda, mi pan con mis ofrendas encendidas en olor grato a mí, guardaréis,”
Dios hace como lo que hacen algunos padres con sus hijos pequeños. El día del padre él les regala dinero con el fin de que ellos compren un regalo y de esta forma sentirse importantes.
2. Las Ofrendas deben darse en el tiempo oportuno cuando Dios quiere y no cuando nosotros queremos. V 2 b “ofreciéndomelo a su tiempo”
3. Debemos darnos de manera diaria. Así como el cuerpo necesita alimentarse todos los días y varias veces en el día, los vínculos con Dios y con nuestros seres queridos deben ser de manera diaria. V 3 b, 6 “cada día, será el holocausto continuo, Es holocausto continuo, que fue ordenado en el monte Sinaí para olor grato, ofrenda encendida a Jehová.”
4. Debemos dar no de manera Mezquina. Números 29: 39 “Estas cosas ofreceréis a Jehová en vuestras fiestas solemnes, además de vuestros votos, y de vuestras ofrendas voluntarias, para vuestros holocaustos, y para vuestras ofrendas, y para vuestras libaciones, y para vuestras ofrendas de paz.” dar tan solo lo que nos toca o porque nos toca no mejora nuestros vínculos con los demás. Debemos darnos de manera completa.
5. Debemos dar de Corazón. 2 Corintios 9: 7 “Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.” el dar conforme se a propuesto no se refiere a la cuantía mucho o poco, dar conforme se propuso en el corazón se refiere a la actitud con que damos las cosas, lo podemos hacer por amor o por obligación.
La única forma de estrechar nuestros vínculos con Dios con los demás y en especial con las personas que amamos es si aprendemos a darnos el todo por el todo.